
Por: Dulce García |
El botulismo ha cobrado relevancia, debido a que el Centro Europeo para el Control de Enfermedades (ECDC) informó este martes de 67 los casos de botulismo iatrogénico detectado en el viejo continente, relacionados con viajes a Turquía para someterse a operaciones de adelgazamiento.
Doce de los casos se han detectado en Alemania, uno en Austria y Suiza, y 53 en Turquía.
¿Qué es el botulismo?
El botulismo es una infección poco frecuente provocada por neurotoxinas producidas principalmente por la bacteria ‘Clostridium botulinum’.
Se conocen 7 tipos de toxina botulínica y los tipos A, B, E y F, son los que generan efectos graves sobre el sistema nervioso humano.
La enfermedad es producida de forma natural, al ser transmitida por alimentos o heridas, como son el caso del botulismo intestinal, infantil o del lactante, que constituyen los tres tipos de botulismo más comunes; aunque, este también puede ser originado por inhalación en la liberación de toxinas en aerosoles, y por efectos adversos o problemas al administrar la toxina durante tratamientos clínicos o estéticos, conocida como botulismo iatrogénico.
¿Cuáles son los síntomas?
La sintomatología general incluye debilidad y dificultad para hablar, tragar o respirar.
El botulismo iatrogénico presenta dolor de cabeza, visión borrosa, parálisis facial, párpado caído, pérdida de reflejos y sequedad de boca, y en los casos más graves, se muestra dificultad para respirar e incluso la muerte.
Y el botulismo por alimentos manifiesta además náuseas, visión borrosa, vómitos o diarreas.
Y el intestinal, estreñimiento y pérdida de apetito.
Con información de Heraldo y Redes sociales.