
Por: Roberto Díaz |
El envío de dólares desde los Estados Unidos a México, por los trabajadores migrantes mexicanos, a las que elegantemente se les llama “remesas”cerraron el 2022 con un nuevo máximo histórico, pese a las condiciones económicas de Estados Unidos y la volatilidad financiera observada en los últimos meses.
Según datos del Banco de México (Banxico), el año pasado los connacionales enviaron 58 mil 497 millones de dólares, lo que representó un alza de 13.4 por ciento frente a lo observado en 2021 y el monto más alto desde que se tiene registro en 1995.
Con datos desestacionalizados, las remesas familiares fueron por 58 mil 501.6 millones de dólares, lo que significó un crecimiento de 4.3 por ciento anual.
Lo anterior, como resultado del desempeño del mercado laboral en Estados Unidos y los estímulos brindados para mantener el consumo, incluso en medio de las expectativas de una desaceleración económica de aquel país.
En su reporte sobre remesas, Banxico añadió que en 2022 la remesa promedio fue de 390 dólares, un 3.3 por ciento más que el monto de 2021, que fue de 378 dólares.
De manera conjunta, los connacionales hicieron poco más de 149 millones de envíos de recursos a sus familias en México. Del total de operaciones registradas, el 98.9 por ciento se hicieron a través de medios digitales, mientras que el resto se efectuó en especie y giros.
El banco central, que encabeza Victoria Rodríguez Ceja, destacó que solamente en el mes de diciembre los ingresos por remesas sumaron cinco mil 359 millones de dólares, el equivalente a un alza de 5.6 por ciento frente al mes previo.