Por: Dulce García |
Desde muy joven, la Reina Isabel II sintió gran amor por los animales, por lo que fue guardiana de dos tortugas gigantes, un elefante, un perezoso y dos jaguares, algunos de los cuales habitaron en el zoo de Londres; y también amo a los caballos y a sus fieles lomitos Corgi, a quienes consideraba familia, y hasta el momento de su muerte, la acompañaron 4 de estos peluditos.
La pasión de la reina por los Corgi viene desde que era una niña, cuando se enamoró del perro de su padre llamado “Dookie”. En 1944, cuando cumplió 18 años, le regalaron una cachorra de Corgi galés de Pembroke llamada “Susan”, quien murió en 1959. A lo largo de la vida de Isabel II, la acompañaron al menos 30 de estos bellos lomitos.
Tal era el amor de la reina por los Corgi, que incluso la acompañaron a su luna de miel en 1947, así como en muchos de sus viajes; e incluso en 2012, sus corgis Monty, Willow y Holly, aparecieron en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.
¿Cuáles son las características de los Corgi?
El Corgi galés de Pembroke es una raza de perro pequeño que por siglos ha sido un perro pastor, se le considera uno de los perros más antiguos de Gran Bretaña. Existe otra raza muy similar, el Corgi galés de Cardigan, ligeramente más grande y de cola larga.
Se cree que las dos variedades Corgi descienden del perro de los visigodos que introdujeron los vikingos en Gales hacia el siglo IX. O puede ser que el Corgi galés de Cardigan sea la variedad más antigua, que introdujeron los celtas en Gales alrededor del año 1200.
El nombre Corgi proviene de la palabra celta “cor gi” que significa “perro enano”. Según otras fuentes, la variedad Pembroke fue traída a Gales por los tejedores flamencos en el siglo XII
El Corgi ha evolucionado del pastoreo a ser un animal doméstico, es un can sumamente inteligente y cariñoso, muy activo y trabajador. Es un perfecto perro de compañía y ladra sólo ocasionalmente.
Sin duda unos lomitos de alta alcurnia, que bellos.
Con información de Excélsior y Redes sociales
