
Por: Carlos Carrera |
Después de más de 15 años de litigio, por tercera vez el Senador de la República, Napoleón Gómez Urrutia y el Sindicato minero (que heredó de su papá), resultaron condenados jurisdiccionalmente a reconocer que los trabajadores mineros tienen derecho a beneficiarse del producto de los casi 55 millones de dólares que, de forma ilegal, retiró Gómez Urrutia del fideicomiso minero.
El pasado mes de octubre la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCyA),siguiendo los lineamientos del Poder Judicial de la Federación, emitió un tecer laudo que condena al Sindicato Minero y a Napoléon Gómez Urrutia, como responsable solidario, a repartir entre los mineros, los 55 millones de dólares que se robó de un fideicomiso, en lugar de haber sido aplicados en favor de los trabajadores, pues los recursos ingresaron directamente a las arcas del Sindicato y Gómez Urrutia dispuso de ellos para beneficio personal.
Esta nueva resolución, no solo ratifica que Gómez Urrutia dispuso de esa suma millonaria para su beneficio, sino que existe un universo de más de seis mil trabajadores que pudieran haber tenido derecho a que se les repartiera proporcionalmente esa cantidad.
Ya existian otros dos laudos que Gomez Urrutia no respetó
Una primera resolución, data del 30 abril de 2018, en la que, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCyA), resolvió en favor de 7 mil ex trabajadores mineros.
La (JFCyA) determinó que los mineros tenían derecho a recibir la proporción correspondiente de esos 55 millones de dólares, más los intereses o rendimientos que esa cantidad hubiera generado durante más de una década.
Pero Gómez Urrutia usó todas las maniobras jurídicas para evitar pagar lo que adeuda a sus propios agremiados.
Un año después, el organismo laboral, resolvió por segunda vez que Gómez Urrtia pagará y por primera ocasión se le señaló como responsable solidario.